Cuando cantamos y bailamos se produce una gran liberación emocional, por un lado nuestras cuerdas vocales se relajan y por otro nuestro cuerpo se destensa. A lo largo de la vida vamos acumulando bloqueos mentales y emocionales y nuestro cuerpo arrastra esas cargas haciendo que nuestro nivel energético esté bajo.
Pues con estas sencillas herramientas puedes liberarte.
En mi caso lo suelo hacer como algo intimo, es decir, prefiero hacerlo a solas cuando no me ve nadie. Entonces me pongo canciones que en ese momento acompañen mi estado de ánimos y me suelto sin pudor a bailar y cantar como si fuera la estrella invitada.
Hazlo, ve probando con distintos registros, pon música clásica y extiende tus brazos, da vueltas. Pon música rock y agita tu cabeza a ritmo de las guitarras. Pon música pachanga, melódica, triste, alegre, étnica, flamenco… descubre el mundo musical que nos ofrece cada cultura.
Sumérgete en una experiencia sanadora de liberación, viviendo el momento, sintiendo tu cuerpo.
Alégrate de poder bailar y cantar.